La minería a cielo abierto es un tipo de extracción de minerales o roca que no necesita un túnel en la tierra. También llamadas minas a tajo, las minas a cielo abierto son aquellas explotaciones mineras que tienen lugar en la superficie, a diferencia de las minas subterráneas. Esto es posible cuando el yacimiento brota en superficie o a muy pequeña profundidad. Empezó a realizarse a mediados del siglo XVI y se utiliza en todo el mundo. Cuando un mineral o roca deseada está cerca de la superficie, las empresas suelen optar por la minería a cielo abierto, debido a sus menores costos y mayor eficiencia. Los pozos abiertos normalmente se cavan en niveles y con paredes en ángulo para reducir el riesgo de colapso o caída de rocas.
Para que una mina a cielo abierto pueda ser llevada a cabo, es precisa la excavación, mediante maquinaria o explosivos de los terrenos que rodean al yacimiento. Aquel material que no sea aprovechable en la explotación es denominado estéril y se deposita en escombreras situadas fuera del recinto de la mina que se utilizará en el futuro para restaurarla una vez se agote. Estos agujeros pueden tener decenas de kilómetros de ancho y miles de metros de profundidad. Generalmente estos pozos aumentan de tamaño hasta que los minerales deseados se agotan o el coste de la extracción se hace demasiado grande.
Existen cuatro tipos de minas a cielo abierto:
A continuación veremos las ventajas y desventajas de este tipo de minería:
Ventajas:
La mayor ventaja de la minería a cielo abierto es la proporción relativamente baja de costos de extracción. Las minas a cielo abierto se eligen cuando los depósitos de minerales valiosos se encuentran debajo de la superficie y donde la sobrecarga (superposición de roca o tierra) es relativamente delgada. Esto significa que no se requiere una extensa red de túneles y costosos soportes estructurales. Por otra parte, los camiones grandes pueden entrar en una mina a cielo abierto, lo que permite una transición más eficiente desde la extracción hasta su procesamiento.
Como la minería a cielo abierto no requiere infraestructura subterránea, las tasas de lesiones entre los trabajadores son mucho más bajas. Los derrumbes son virtualmente eliminados como riesgos, y la acumulación de gases tóxicos, que pueden causar explosiones repentinas o contribuir a las enfermedades crónicas, no se produce.
La minería a cielo abierto es significativamente menos costosa que la minería subterránea. Los ahorros en infraestructura y mano de obra se trasladan al comprador de materiales extraídos y, eventualmente, al consumidor.
Desventajas:
Al igual que con todas las formas de extracción de minerales a gran escala, la minería a cielo abierto puede tener un impacto negativo sobre el medio ambiente y los ecosistemas. La eliminación de la sobrecarga destruye el paisaje pre-existente y contribuye a la erosión. Por otra parte, los productos químicos utilizados para el tratamiento de los minerales extraídos (por ejemplo, el cianuro que se utiliza para tratar el mineral de oro) a veces pueden fugarse en los sistemas de suelos y aguas circundantes. Las minas a cielo abierto también requieren numerosas carreteras y una infraestructura de producción o tratamiento.
Las piletas de residuos son grandes cuerpos de agua que contienen residuos que quedan después de la extracción y el tratamiento de minerales. El agua contaminada se encuentra en estos estanques, que generalmente están recubiertos con un material impermeable, hasta que el agua se evapora y los contaminantes sólidos pueden eliminarse. Sin embargo, estas piletas de residuos no siempre pueden contener estos residuos si no están bien construidas o mantenidas. Esto puede generar que los contaminantes se filtren hacia los sistemas de suelo o la superficie local y el agua subterránea. La exposición a muchos de los productos químicos utilizados en la minería puede causar problemas de salud tanto inmediatos como crónicos.
Consecuencias de la minería a cielo abierto
Una de las principales desventajas de este tipo de explotación minera es el impacto medioambiental que provoca. Dado que se utiliza cianuro, mercurio y ácido sulfúrico para eliminar el estéril, se contaminan aguas subterráneas y el aire en forma de polvo tóxico. Esto es absorbido por animales y plantas.
La excavación en sí genera un impacto sonoro que ahuyenta a los animales de la zona, lo que provoca un cambio en el hábitat de muchas especies. Además, se trabaja sobre una gran extensión de terreno que queda desfigurada por la acción mecánica. Esto disminuye el atractivo estético y el turismo de la zona, y perturba a las comunidades.